Club Baloncesto Femenino Huesca

SEMIFINAL

PROA CONSTRUYE 63 - ROMAREDA 61

Parciales: 13-9, 15-12, 15-15, 9-16 y 11-9

Anotadoras: Sara 12, Alicia 4, Cristina 12, Andrea, Ana 6, Isabel, Patricia 14, Gabriela 8 y Yaiza 6

Comenzó mejor Marianistas, mandando en el juego. Un equipo que ha crecido que tiene claras las cosas y que han hecho de la unidad de su grupo su mayor valor. Por fortuna a nosotras, Proa, eso de de ser un grupo unido nos viene de cuna, de club, y por allí pudimos competir con ellas. Pero mandaban las zaragozanas. Ellas venían de jugar, de competir, y nosotras nos metíamos en una sauna sin haber jugado en un mes. Alicia comenzaba anotando para Proa pero no era suficiente. Los cambios nos vinieron bien. Entraron Gabri, Patri e Isa y eso quiere decir que el equipo mordía. Mordía e iba a buscar a toda la pista a Marianistas en un esfuerzo titánico. Lográbamos robar, correr y dar la vuelta al tanteo con una inspirada capitana, Patricia, que veía el aro como una piscina. El equipo entró en buena tónica que mantuvimos todo el segundo cuarto pero sin podernos escapar en un marcador que parecía a régimen de puntos. Al descanso se iba a llegar con uno de esos triples que ves en la tele desde muchos metros en el último segundo de Cristina.

El tercer cuarto fue al revés, Proa salió a presionar y mantuvo la renta, y la elevó a 10 puntos para después contemporizar y ser más conservador. Un cuarto dónde al minuto 9 estábamos en bonus, y las zaragozanas, más duras, no habían sido sancionadas con ninguna falta. Un mal último minuto iba a castigar a Proa con un 5-0 que metía a Marianistas en partido.

Fue entonces cuando estuvimos contra las cuerdas. Cansancio, nervios, dudas, ver que te pueden cazar, un equipo contrario unido, animoso, y con una jugadora como Lopez que no fallaba desde la línea de tres. La junior Sara ponía el 52-50 en el marcador a falta de pocos segundos, ellas respondían. Quedaban 2 segundos y no salió la banda de Proa. Prórroga. Para entonces con Gabriela y Patricia ya fuera por faltas.

Comenzamos llevando la iniciativa en el tiempo extra. Sara volvía a anotar, ellas lo hacían siempre desde el tiro libre sin fallo, ahora anotaba Yaiza 61-57, ellas lo volvían a hacer aprovechando que estábamos en bonus. Ellas metieron sus tiros libres, nosotras no. A 3 segundos, anotando un segundo tiro libre, Marianistas empataba el partido. ¿Otra prórroga?. Tres segundos dan para mucho. Esta vez sí salió la jugada de Proa. Pusimos el partido en las manos de Ana con un aclarado en el poste bajo. Y Ana que es una jabata anotó sobre la bocina.

FINAL DE 1º DIVISION ARAGONESA
OLIVAR 50 – PROA CONSTRUYE 52
Parciales: 19-13, 26-25, 34-40, 50-52

Anotadoras: Sara 6, Isa 2, Ali, Cristina 14, Patri 2, Gabri 9, Ana 17, Andrea y Yaiza 2.

Primero hay que poner en valor al equipo zaragozano. Las de Olivar han dominado la categoría todo el año con solvencia. Han sido las mejores en liga regular de calle. Un equipo con capacidad para anotar, correr, hacer un baloncesto ágil. Felicitar su gran año. De esta saldrán más fuertes.

La final era en su pista, en ese pabellón que parecía una sauna, con mucha gente en las gradas animando lo que presumiblemente iba a ser una fiesta de las zaragozanas. Nosotras éramos las invitadas. Al autobús de Proa no se subieron solas las chicas. Ayer, día de la madre, se sumaron las madres de las jugadoras ( y alguna supersenior) ¡Qué bonita foto la del final del partido juntas!. Yo no sé qué regalo les hicieron ayer las chicas a sus madres, pero sí sé, porque vi sus caras, que al acabar el partido las hicieron felices. Éramos felices. Muy felices. Todo un año de trabajo vale la pena por ser tan felices ese ratito. ¡Vaya si lo vale!.

Comenzaron las zaragozanas lanzadas. 12-2 en un abrir y cerrar de ojos. El guión más lógico se cumplía. Era como ver venir la tormenta. Proa estaba desdibujado en defensa. No ajustaban bien los pares. Nos corrían siempre. La solución fue meter en pista un equipo más pequeño, algo que el sábado nos había ido muy bien. Y así entraban en pista Gabri, Isa y la capi Patricia. Y para Proa la tormenta amainó. Culpa para que el cuarto terminase con un 19-13, además del trabajo de las tres pequeñas, fue el espíritu, y la calidad, de la joven Sara y del acierto desde la línea de tres de Cristina.

En el comienzo del segundo cuarto Proa mantuvo sin anotar a las zaragozanas más de tres minutos. Eso nos acabó metiendo en el partido. Un partido que ese segundo cuarto iba a ser de tandas de golpes entre dos púgiles. Luego eran las zaragozanas las que hacían un 7-0 a si favor para que Ana con dos tiros libres y triple sobre la bocina golpease la moral local y dejase a una grada en silencio. La película que habían venido a ver no era la que tenían ante sus ojos.

El comienzo del tercer cuarto iba a ser clave. Proa arriesga y pone una zona 3-2 en pista. Una zona que nunca habían puesto en un partido de competición. En punta una chica grande como Sara para cerrar penetraciones. Y en un lado de la pista Ana e Isa que iban a hacer un 2x1 siempre que el balón llegase a esquina. Ana es la competitividad hecha jugadora y poner a Isabel en la línea de fondo, a pesar de ser una jugadora pequeña, es una garantía puesto que es tan dura como lista. Para cerrar el aro, como candado, Yaiza y las inversiones de balón eran cosa de ese correcaminos que es Cris. Y Olivar se atascó. Y el trabajo para Proa dió sus frutos. Y las oscenses pasaron a dominar el marcador. Y ya no sembraban la incertidumbre sino la posibilidad cierta de que el triunfo viajase a Huesca. Y volvieron a pista Andrea, Alicia y Patri y siguieron currando. Vaya si lo hicieron. Trabajaron como si la felicidad les fuese en ello. Y entró a manejar el partido Gabriela, una junior que tiene carita de no romper un plato, pero que te hace un descosido si le das un metro. Y en eso anduvo Gabri.

En el último cuarto, a los dos equipos les costaba anotar. El cansancio, la tensión, todo hacía el aro más pequeño. Las de Olivar con dos triples de Viñas iban poner el partido en un pañuelo. Pero Ana iba a contestarlos manteniendo con 2 puntos arriba a Proa a falta de un minuto. Si Viñas acertaba desde lejos iba a fallar sus dos tiros libres y la que no iba a perdonar desde la línea era Cristina.

Enorme la felicidad. Enorme el trabajo de todas las chicas. Enorme la satisfacción. El año ha sido durísimo. Llegar a la final era un éxito ganarla… la leche. Indomables, estas chicas son indomables.Gracias, gracias muchas gracias.

Ese club, el Club Baloncesto Femenino Huesca, ese reducto del baloncesto femenino en la ciudad del norte, ha vuelto a poner una muesca en su historia. Fuimos a competir y fuimos felices.